Guía de traducción de “ciertas” frases masculinas
Si necesita una guía para decodificar frases masculinas tipo “No va a pasar nada que tú no quieras que pase” este artículo es para usted.
Pregunté a varios amigos cuáles eran las frases que más repetían cuando estaban tratando de conquistar a una mujer o en el transcurso de una relación. Muchas las había oído, me las habían dicho a mí o a mis amigas, así que pensé que era mejor traducir, de una vez por todas, lo que verdaderamente quieren decir.
Estas son las frases que nos dicen los hombres cuando nos quieren conquistar. O cuando nos quieren meter mano. (Lo que pasará a continuación NO te sorprenderá).
“No va a pasar nada que tú no quieras que pase”.
Querida, aquí te va a pasar de todo y ni te vas a dar cuenta. Normalmente los hombres dicen eso para parecer considerados y generar confianza con el fin de obtener lo que quieren. Y todas sabemos lo que quieren. Hay que presionar el botón de pánico si la frase va seguida de: “¿Pedimos otra mediecita?”. En cualquier caso TÚ DECIDES.
“¿Quieres que nos vayamos para otro lado?”.
Pichar, lo que quiere es pichar. Esto quiere decir, literalmente, que quiere meterte mano de manera inmediata, solo que no se siente con la confianza suficiente para decírtelo directamente, o para hacerlo en el lugar en el que están. Si tú das alguna señal de que te parece buena idea moverse a otro sitio, en cuestión de segundos vas a terminar en un motel o en su apartamento. Si no das una señal, también, porque hay algunos hombres que tienen el ego más grande que el Nevado del Ruiz. También en este caso, y en los demás, la que decide eres tú.
“Tranquila, ella es como un amigo para mí”.
Cuando dice esta frase es porque no se quiere comer a la amiga a la que le tienes celos. Simplemente la considera más importante que todas las demás mujeres del mundo, tú incluida, así como a sus amigos. Cuando está tan seguro de que no va a pasar nada con su amiga es porque sabe que ella nunca se lo va a dar. Quizá hasta le insistió en la fiesta de fin de semestre y la pelada no le dio nada; o lleva semanas hablando con ella por el chat de Facebook e intercambiando fotos. Así que, como dicen por ahí, tu chico está ganando indulgencias con padrenuestros ajenos y quedando bien contigo gracias al rechazo de la otra.
“Una relación se basa en la confianza, mi amor. Si no tenemos confianza mutua, nuestra relación no puede prosperar”.
Aquí te deberías preocupar un poco porque lo más seguro es que tu novio o esposo tenga el pecado (o pecaíto). Es la típica frase que denota condescendencia, la que busca recordarte que eres la persona que está con él y que él no (necesariamente) va a portarse mal cuando estén lejos. En esos casos es mejor estar alerta y recopilar la información suficiente para tener un caso sólido cuando decidas hacer estallar la verdadera “Madre de todas las bombas”.
“Solo puedo verte como una amiga”.
Esta frase es completamente literal y significa, en serio, que no nos quieren tocar ni borrachos. Tendemos a creer que los hombres son tan básicos que no les importa tirarse a cuanta mujer encuentren por ahí, y tal vez sea así, pero en este caso específico, cuando te sale con esta puñalada al corazón, es que no hay nada qué hacer. La única forma de cambiar esto es con aguardiente, mucho aguardiente, sea porque durante la borrachera se quiebren voluntades o porque durante la misma conozcas a alguien más. Está comprobado que es más fácil salir de datacrédito que de la friendzone.
“Ese tal amigo tuyo te quiere comer, yo lo sé”.
Claro, cuando a ellos les habla mucho una nena, es “solo una amiga”, pero recibir el saludo de un hombre tiene que ver, sí o sí, con fines sexuales, así el que nos hable sea el hermano bobo de la exmejor amiga que teníamos en quinto de primaria. Cuando nosotras nos sentimos celosas, somos capaces de hacer una presentación de Power Point con gráficos que les dicen exactamente en qué fecha hicieron eso que nos puso así, pero ellos se limitan a repetir que todos los hombres nos quieren comer.
“Nunca me había sentido así”.
Esta joyita tiene dos significados según en la etapa de la relación en que la diga. En la etapa de la conquista es una afirmación completamente falsa, la dice para que te sientas especial. Así que si quieres abonarle la intención, escúchala con bondad. En la segunda etapa, que es la del noviazgo (si llegan allá), es cierta, porque ya no hay muchas pretensiones ni ánimo de mentir. (Se supone, no lo puedo sostener). Aunque nunca se sabe, a mí me gustaría creerles siempre.
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